Cuantas veces no tenemos miedo a que las cosas que deseamos se deshagan ante nuestros ojos.
Solo quiero ser tu amiga y poder acostarme en tu pecho...
Te regalo un abrazo de los que siempre te doy cuando te veo, una sonrisa de las que se asoman a mi boca cuando veo tus ojos negros y por ultimo un beso como el que alguna vez robe de tu carnosa boca.
Aveces encontramos cariño donde ni siquiera lo buscamos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario